Acogedor refugio de montaña en un pueblo antiguo

A 1.000 metros de altitud para los que buscan algo único, un chalet regenerado, inmerso en la naturaleza y atravesado por el antiguo camino utilizado por los pastores, goza de vistas panorámicas sobre todo el valle y el bosque. Equipado con todas las comodidades y de impacto cero gracias al uso de energías renovables y a la utilización de materiales reciclados para su construcción.

Si quieres sumergirte en la naturaleza, este es tu lugar, aquí adaptarse y disfrutar de la "nada" es un placer para el alma.

El chalet se compone de la siguiente manera: en la planta baja hay una cocina americana con zona de estar y sofá cama, así como un gran cuarto de baño completo con ducha, inodoro, bidé, ducha y lavabo; en el altillo, conectado por una cómoda escalera de caracol, hay una cama francesa.